sábado, 3 de enero de 2009

Sábado.

Un escritor frente a su máquina un sábado por la mañana escribe todas esas palabras que no serán escritas por (ningún) otro escritor ese mismo día. Un personaje escribe el sábado siguiente las líneas en las que un músico compone una música que no quiere escuchar. Un cantante que habla el martes acerca de un poema cantado que nunca escuchó. Un poeta que compra un medicamento ese mismo jueves por un dolor que no entiende. Un médico que, dos semanas después, lee la historia de un cineasta que filma la historia de un hombre que no escribe por temor a comprenderse. Una mujer que muere ese mismo domingo. Una mujer que nace en los sueños de muchos hombres que la piensan. Un filósofo que cree comprender el dolor, temiéndole. 

1 comentario:

Anónimo dijo...

Una mujer que está feliz porque su amigo poeta,médico,filósofo sigue escribiendo.